Inseguridad, problemas con la atención en las salas de salud municipales, calles intransitables y falta de conectividad, algunas de las denuncias recibidas en la Defensoría del Pueblo local durante la cuarentena. Quejas por la falta de personal y pocas soluciones prácticas.
Desde el inicio del prolongado confinamiento obligatorio decretado por la pandemia del Coronavirus, en la Defensoría del Pueblo local “aumentaron” las denuncias de los vecinos relacionadas especialmente con temas de “salud y seguridad”, explicó uno de sus integrantes, Daniel Barragán. Si bien no pudo cuantificar el porcentaje de ese crecimiento, detalló que respondieron “3.422 consultas por correo electrónico en 104 días”. Más allá de escuchar a los denunciantes, el área no acerca soluciones ya que su función radica en “ser una herramienta de control de los servicios del municipio” y reconoció que “por necesidad nos metemos en otros temas”.
Si bien la oficina ubicada en Belgrano al 2700 se encuentra cerrada para la atención presencial del público, tanto vía telefónica como por e-mail se reciben las denuncias desde el inicio del aislamiento social preventivo y obligatorio (ASPO).
“En el principio de la cuarentena todos los reclamos estaban relacionados con la problemática de los bancos, que estaban cerrados, y las oficinas de cobro sin funcionar que no permitían ni los pagos ni los cobros”, explicó Barragán, que comparte funciones con Fernando Rizzi y Luis Salomón.
Con el paso de los meses, y especialmente “en los últimos dos”, los reclamos se anclaron en “temas de seguridad y de salud”, describió el funcionario.
Crecimiento
Asimismo, Barragán aseguró que “en los últimos dos meses crecieron enormemente las cuestiones relacionadas con salud y seguridad”.
En materia de salud, especificó que las denuncias se centraron en “el achicamiento de los turnos en las salitas de salud primaria, la desaparición de las ambulancias de Batán y Chapadmalal y casi el cierre del Centro de Atención Primaria de Salud (CAPS) de Chapadmalal”.
En cuanto a la seguridad, señaló que el tema “recurrente son los robos y el consumo en la Zona Roja” y aseguró que “creció la inseguridad en barrios como Félix U. Camet, Parque Camet y Beltrán”.
En ese sentido, describió que durante la cuarentena “aumentaron las resoluciones de conflictos entre vecinos, como la convivencia en los edificios. El encierro generó problemas de relaciones importantes”.
Por otra parte, denunció “la emergencia vial” que afecta a “varios barrios, tanto del sur como del norte, que no permite que entre una ambulancia o los bomberos. Está todo colapsado”. Asimismo, enfocado en el sector sur de Mar del Plata, denunció “la inexistencia de cajeros automáticos y la reducción de la movilidad del transporte público de pasajeros”.
Además, aunque reconoció que “se trata de un problema antiguo”, señaló la “falta de conectividad en la zona norte, como Camet, que se agrava más porque están todos en casa en el marco de la pandemia y sin internet ni señal”.
En otro orden, Barragán se quejó “por los basurales a cielo abierto” que se forman en distintos sectores por efecto “de la poda y del abandono del trabajo del camión almejero”.
Aunque no se trata de cuestiones que atañen directamente a la dependencia que integra, Barragán señaló que “recibimos denuncias por temas de Defensa del Consumidor”, como también sobre el corte de “servicios de Incluir Salud, que afecta a alumnos de escuelas especiales, que están con un riesgo sanitario muy grande”.
Finalmente aseguró que continúan “trabajando en el tema de la recategorización de la factura de gas”, aunque las mismas están congeladas hasta fin de año por decisión del gobierno y se quejó por “la falta de personal, renunciaron dos personas y no podemos nombrar a nadie”.
Atención
Si bien la Defensoría del Pueblo no está abierta al público, atiende las requisitorias de forma remota, ya sea por teléfono o por correo electrónico, de lunes a viernes de 8 a 14. Los números telefónicos son 4-996503, 4-935839 y 4-996502 o a info@defensoriadelpueblo.mdq.gov.ar